Cuidados, Salud

Ejercicios visuales: Rutinas diarias para mantener tus ojos en forma

En un mundo cada vez más digitalizado, donde la mayoría de nuestras actividades, ya sea laborales o de ocio, involucran alguna forma de pantalla, el estrés en nuestros ojos es más prominente que nunca. Aunque no podemos tratar patologías oculares específicas con simples ejercicios, sí podemos usar rutinas visuales para mitigar el cansancio, la sequedad y otros síntomas molestos de fatiga ocular.

 

Ejercicios fáciles para mejorar la salud ocular

Estiramiento facial

Este ejercicio no solo ayuda a relajar los músculos faciales, sino que también puede reducir la tensión acumulada alrededor de los ojos. Abre la boca lo más que puedas, como si fueras a bostezar, y mantén esa posición durante unos 10 segundos. Luego, relaja los músculos faciales lentamente. Repite este ejercicio tres a cinco veces para maximizar los efectos relajantes.

Masaje de acupresión

La digitopuntura es una técnica milenaria que se utiliza para mejorar diversas funciones del cuerpo. Con tus dedos índice y medio, aplica una presión firme pero cómoda en los puntos de acupresión ubicados en los extremos de las cejas y en la esquina interna del ojo. Mientras haces esto, asegúrate de respirar profundamente para ayudar a relajar todo el cuerpo. Realiza este masaje durante unos 2 minutos.

Parpadeo

Puede sonar simple, pero el parpadeo rápido y frecuente puede ser sorprendentemente efectivo para reducir la tensión en los ojos. Al hacerlo, estás lubricando la superficie del ojo, lo que puede reducir la sequedad y la sensación de «arenilla». Parpadea rápidamente unas 20 veces para sentir alivio inmediato.

Movimientos oculares

El objetivo de este ejercicio es mejorar la flexibilidad de los músculos que controlan el movimiento de los ojos. Para hacer esto, sigue con la mirada objetos que se muevan en diferentes direcciones, como de izquierda a derecha y de arriba abajo. También puedes enfocar tu vista en diferentes distancias para hacer que tus ojos trabajen un poco más. Haz cada movimiento unas 10 veces.

Enfoque cercano y lejano

Este ejercicio es ideal para personas que pasan mucho tiempo enfocando de cerca, como leer o trabajar en una computadora. Siéntate cómodamente y estira el brazo frente a ti, con el pulgar hacia arriba. Enfoca en el pulgar durante 5 segundos y luego cambia el enfoque a un objeto lejano, como una ventana o un árbol, durante otros 5 segundos. Repite este ejercicio unas 10 veces para optimizar los músculos de enfoque.

 

Ventajas de ejercitar tus ojos

Reducción de la fatiga

Si trabajas en una computadora o disfrutas leer durante largos períodos, probablemente hayas experimentado alguna forma de fatiga visual. Estos ejercicios te ayudarán a combatir esos síntomas molestos y a mantener tus ojos frescos durante más tiempo.

Mejora del enfoque

Los problemas de enfoque, como la presbicia o el astigmatismo, pueden complicar las tareas cotidianas. Practicar ejercicios de enfoque regularmente puede mejorar tu habilidad para alternar entre diferentes distancias de visión, lo cual es especialmente útil para actividades como conducir.

Fortalecimiento muscular

Los músculos que controlan los movimientos de tus ojos también necesitan ejercicio. Estos ejercicios ayudan a fortalecer esos músculos, lo que puede resultar en una mejor movilidad ocular y menos tensión al final del día.

Mejora circulatoria

Una buena circulación sanguínea es vital para mantener una buena salud ocular. Los ejercicios que incluyen masajes y movimientos estimulan el flujo sanguíneo hacia los ojos, lo cual puede reducir la sequedad y otros síntomas molestos.

Reducción del estrés

Finalmente, estos ejercicios no solo benefician tus ojos, sino que también pueden ayudar a relajar todo tu cuerpo. El estrés puede tener un efecto negativo en tu salud en general, incluida la de tus ojos. Practicar estos ejercicios puede ser un buen antídoto contra el estrés diario.

 

Si sientes que tus ojos están cansados o tienes problemas visuales recurrentes, estos ejercicios podrían ser una adición útil a tu rutina diaria. Sin embargo, para problemas serios o persistentes, siempre es mejor consultar con un profesional de la salud visual.